miércoles, 17 de noviembre de 2010

Crónicas Nocturas III: Aletear en mitad del Resplandor



Colibrí sobre baldosa.

Tan sucio. Tan bello.


Multiplicada en cientos de mí,
vuelo alrededor de la cabeza de un pájaro.
Pobre pájaro loco. Abre el pico y nadie le entiende.
Hay veces que piensa en disparase/me.

Soy la Alicia apátrida.
La Maga sin tiza
ni rayas que esnifar
en una rayuela sin piernas

El desorden es tan fácil
pasas por aquí
y dejas la escena de un crimen
Cuánto tardaré en borrar las pistas
que siguen la lógica de tu modus operandi

Ted Bundy y otros pocos
también tuvieron sus momentos de gloria
(y hasta clubs de fans)
-el drama es tan romántico-
Dejarlo todo como estaba. Todo menos algo.
El cuerpo.

Los pájaros también
(a)ma(n)tan.

6 comentarios:

  1. Realmente bello... sombras que se dejan plasmadas en la porcelana....

    Saludos y un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. todos tenemos nuestro momento de gloria, ¿o no?

    ResponderEliminar
  3. Prohibido queda entonces, no dejarnos el cuerpo;) Gracias Jorge.

    ResponderEliminar
  4. Como siempre, escribes con elegancia, misterio y agarras el momento a los ojos. Mis felicitaciones.
    Un Abrazo

    ResponderEliminar
  5. jo, muchas gracias Edu. Un Abrazo fuerte de vuelta ;)

    ResponderEliminar