miércoles, 28 de octubre de 2009

Hoy vi una estrella caer lentamente,
aún no era de noche
cuándo ella trataba de fugarse
de Madrid y su lacónico silencio ...
Mis ojos la siguieron hasta ver su desaparición.
Eso si, antes de marcharse dejó en mis labios un deseo.
Es difícil ser y estar solamente
anclada en este ahora
y no pensar en el siempre
y en el "
lo dejaré para otro momento",
finalmente todo tiende
a fugarse dejando una estela a su paso.

1 comentario:

  1. Ayer dejé caer esa estrella,
    lentamente...
    Sobre el manto con el que Madrid cubre sus silencios.

    Pude ver a tus ojos persiguiéndola,
    y a tus labios besarla con deseo.
    Fuí testigo mudo,
    de tu sonrisa desnuda y de tu duda latente.

    Un deseo tuyo en el ahora,
    navegando hacia el siempre.
    Una estela pasajera,
    que sin embargo, quiso quedarse...

    *

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