Sonríe, nos están disparando
El elefante se balanceaba
sobre la cabeza del Rey
Alicia no era Alicia
fue quien sufrió la guadaña
la hoguera
las piedras
fue la bruja
la ramera
la santa
quién
quién puede destruir un mundo infame
y volver a recomenzarlo
como aquellos puzles
que encajábamos sin respirar
y seguir amando -a pesar de todo-
cuántas
cuántas veces
somos ojos ciegos
bocas rotas
luces negras
Atrás
repito
atrás
las manos manchadas
los anos manchados
los corazones manchados
de pólvora
no.
no somos la historia del dictador
ni el artilugio metálico
intercambiable por filetes en supermercados
no nos busquéis
en los lavabos
en los puentes
en las alcantarillas
ni en la garganta agónica
de la voz agónica
de aquella agónica civilización
mirad
todos esos tanques
y juguetes rotos
en las calles
donde antes hubo flores
escaparates de barbies y cazadores
ya no queda nada
solo escombros
pelos
cucarachas
babas
los últimos resquicios
de la humanidad
se apagan las luces
cierra los ojos
abre el pecho
levanta la cabeza
nos alcanzan
las certeras balas del despertar
abre los ojos, ya hemos llegado.
Luces negras iluminando de oscuridad los escombros de lo que fue.
ResponderEliminar¡Brillante!
Saludos
J.
Lo he leído a saltos de vista mientras el dedo pulsaba la tecla flecha abajo. Casi milimétrico. Fílmico.
ResponderEliminarAgradecida de esos ojos que saltan fílmicamente :)
EliminarIntercambiable por filetes en supermercados
ResponderEliminarempanados, sobran billetes